Urbek City Builder exige un uso eficiente de los recursos naturales, no del dinero
Urbek City Builder parece una entrada tradicional en el género: colocas edificios, coches y personitas empiezan a corretear por ahí, y poco a poco vas expandiendo tu expansión urbana. El giro es que no hay dinero que alimente tu construcción. En su lugar, tu ciudad florece o no en función de tu capacidad para cumplir los requisitos de recursos de cada edificio, lo que rápidamente convierte el progreso más en un rompecabezas que en un juego de gestión.
Ya está disponible en Steam, y a continuación puedes ver un tráiler de su bonito mundo voxel.
Cada edificio que construyas en Urbek consumirá ciertos recursos y generará otros. Electricidad, alimentos, carbón, trabajadores cualificados: los recursos son muchos y variados. Al colocar los edificios estratégicamente, tu objetivo es satisfacer los criterios de recursos de los edificios vecinos para que mejoren y, a su vez, produzcan más y consuman menos. El objetivo final es construir una ciudad eficiente y atractiva antes de quedarte sin recursos naturales.
Es posible, entonces, elegir configuraciones fáciles y simplemente ponerse a construir. Urbek es inusualmente atractivo para un constructor de ciudades indie, gracias en parte a su nítido arte voxel, y puedes construir ciudades aparentemente inmensas. También puedes tomar el control de un peatón y explorar tu ciudad en primera persona, si lo deseas.
También es posible aumentar la dificultad, lo que normalmente significa jugar en un bioma que ofrece menos recursos naturales y en una masa de tierra que te limita. Cuanto más pequeña sea la zona en la que tienes que construir, más tendrás que tomar decisiones difíciles sobre qué y dónde colocar cada edificio.
Urbek no es el primer constructor de ciudades que se inclina más por el juego de puzles que por la gestión, y me recuerda a un Concrete Jungle menos constreñido. En cualquier caso, es un material interesante.
Puedes encontrar Urbek City Builder en Steam, donde cuesta 13,50 €/€14.