El desarrollo de Redfall parece un desastre, según un nuevo informe
Redfall sufrió un tumultuoso ciclo de desarrollo en el que los desarrolladores de Arkane Austin esperaban que Microsoft reiniciara o cancelara el proyecto, según un nuevo informe de Bloomberg. El shooter cooperativo recibió críticas mayoritariamente negativas el mes pasado, algo poco habitual en la excelente trayectoria de Arkane.
El informe afirma que Redfall entró en producción en 2018 ya que la empresa matriz ZeniMax esperaba «venderse a sí misma.» Como resultado, la compañía alentó a sus estudios a desarrollar juegos con elementos de servicio en vivo que pudieran generar ganancias consistentes a lo largo del tiempo, lo que potencialmente los haría más atractivos como objetivo de adquisición. Eso también podría explicar la prevalencia de las microtransacciones en juegos como Fallout 76 y Wolfenstein Youngblood.
Incluso los orígenes de Deathloop se remontan a esa especie de mandato no real. Jeremy Peel entrevistó al fundador del estudio, Raphaël Colantonio, quien dijo que Zenimax quería «algo que tal vez tenga multijugador para que podamos aprender multijugador, algo que tal vez tenga microtransacciones.» Según Bloomberg, Redfall habría tenido microtransacciones hasta 2021.
El informe de Bloomberg también afirma que el lanzamiento de Redfall como un «juego multijugador de Arkane» hizo que el equipo de desarrollo, escaso de personal, se sintiera confuso en ocasiones. Bloomberg afirma que alrededor del 70% del personal que trabajó en Prey había abandonado el estudio en el momento en que Redfall finalmente se lanzó, con los desarrolladores veteranos dejando por su dirección poco clara y los salarios menos competitivos de ZeniMax en el momento.
Cuando Microsoft adquirió ZeniMax y todos los estudios que la acompañaban en 2020, algunos desarrolladores esperaban que Mircosoft cancelara o reiniciara el juego. Microsoft, en cambio, adoptó un enfoque de no intervención con los equipos de nueva propiedad, y el jefe de Xbox, Phil Spencer, dijo recientemente en una entrevista con Kinda Funny que el editor «no hizo un buen trabajo al principio para comprometerse con Arkane Austin para ayudarles realmente a entender lo que significaba ser parte de Xbox.»
Nuestro análisis de Ed’s Redfall señalaba: «Hay momentos de maravilla enterrados en Redfall, en los que afloran la caligrafía y la maestría arquitectónica de Arkane», pero «da la sensación de que lo que ha llegado es un juego que ha sido tirado en tantas direcciones que no ha podido con ellas». Suena bastante bien.