Crítica de Windjammers 2: acción arcade de forma sencilla y apasionante
Estamos en un periodo de «cartas de amor» a los medios de comunicación. Algunas cosas viejas vuelven con cosas nuevas que decir, como Las resurrecciones de Matrix, y algunas cosas viejas vuelven simplemente para divertirse y recordar a los fans de antaño lo que les gustaba del original en primer lugar, como Scream.
Windjammers 2 entra de lleno en esta última categoría. Tras resucitar con éxito Streets Of Rage en 2020, la desarrolladora Dotemu ha vuelto a las andadas y nos trae Windjammers desde 1994 (antes de que yo naciera) con una nueva capa de pintura y acción al más puro estilo ultimate frisbee en esta secuela.
El renacimiento de Dotemu es muy simple a primera vista: dos personas lanzan un frisbee de un lado a otro con suficiente energía como para hacerse polvo mutuamente, con el objetivo de pasar el frisbee por encima de su oponente y meterlo en una zona de «meta». El objetivo es poner el frisbee donde tu oponente no pueda alcanzarlo, haciendo rebotar el disco volador en las paredes e incluso en las barreras del centro de la pista para ponerlo fuera de su alcance y embolsarte puntos de gol.
Esto es ultimate frisbee, pero si el disco volador pudiera desafiar las leyes de la física. Cuando atrapas el frisbee de tu enemigo, tienes unos segundos preciosos para decidir cómo lanzarlo: puedes doblar el frisbee alrededor de tu oponente, hacerlo rebotar rápidamente en los bordes de la pista o lanzarlo al aire como una pelota de voleibol. Simplemente lanzarlo de un lado a otro es Windjammers 2 en su forma más básica; doblar y rodear el frisbee alrededor de tu oponente lo convierte en un rápido juego de piezas en movimiento.
Windjammers 2 se convierte en una electrizante prueba de tus reflejos en la fase defensiva. Dotemu ha ampliado un poco la capacidad de deslizamiento con respecto al original para cubrir más terreno, de modo que puedes ir derrapando por la pista de rodillas para interceptar rápidamente los frisbees que saltan hacia tu mitad de la pista y que normalmente estarían fuera de tu alcance. Aquí, ningún frisbee está nunca fuera de tu alcance: la responsabilidad recae en tus reflejos para ver si puedes predecir con precisión su sinuosa trayectoria a gran velocidad hacia tu lado de la pista.
Los tiempos de reacción me dejaron atónito al principio. «Esto es un juego de frisbee», pensé estúpidamente. «¿Por qué requiere los tiempos de reacción de un jugador de CS:GO?». Ese pensamiento inicial sólo me pareció más ignorante cuanto más me adentraba en el legado de Windjammers, ya que me encontré con torneos EVO en los que los tiempos de reacción rivalizaban con los de expertos en Mortal Kombat y Guilty Gear. A primera vista, Windjammers es un juego de frisbee, pero al ir quitando capas se descubren nuevos aspectos de su afiladísima jugabilidad, como la combinación de disparos con carga para conseguir nuevos ataques especiales.
Sin embargo, son los supermovimientos los que hacen que Windjammers 2 sea más rápido. Cada personaje tiene un lanzamiento especial cargado que puede lanzar en cualquier momento de la partida: sólo tiene que cargarlo lanzando el frisbee en el aire hacia sí mismo. Por ejemplo, en el supermovimiento de Raposa, el frisbee derriba una barrera de la pista antes de teletransportarse a la otra, mientras que Max lo carga con una potencia de fuego etérea antes de devolverlo a su oponente. Aprenderse el movimiento especial de cada personaje es una tarea ingente, incluso más memorizar con precisión dónde va a ir el frisbee y cuándo, pero es una capa añadida sorprendentemente agradable de dominar una vez que te has hecho con lo básico.
Windjammers 2 sorprende por la profundidad de sus personajes. Cada jugador de frisbee se mide en dos atributos: velocidad y potencia. Algunos se apoyan mucho en la primera, como Raposa, que corretea por la pista, o puedes encontrarte con los bíceps de Wessel, con una potencia suprema. Aunque por lo general necesitarás mejores tiempos de reacción como personaje más manso para enfrentarte a la potencia dominante de alguien como Wessel o Max, ningún emparejamiento de personajes se siente roto, ya que el campo de juego sigue permitiendo que todo el mundo se mantenga en un nivel competitivo.
El clásico de Neo Geo Windjammers tenía un estilo artístico pixelado en el que todo el mundo parecía un poco grasiento y desgastado, como si acabaran de salir de una juerga nocturna. Windjammers 2 ha recibido una gran actualización que lima las asperezas del original para ofrecer algo fresco y vibrante. Por otra parte, si Windjammers 2 es un retorno a la época en la que se desarrolló el original, ha clavado absolutamente esa estética. En 2022, Windjammers 2 se ve y se siente como si tuviera lugar en Los Ángeles de los 90, como si todo el mundo estuviera cortando por lo sano en el fondo de Point Break, y cada esquina estuviera repleta de personajes de Matthew Lillard de la época de Scream.
Windjammers 2 es un bombazo. No sabía muy bien qué esperar del renacimiento de Dotemu. Supuse que se dirigiría a un público muy específico en el que no me incluía, y no me equivocaba del todo: ni siquiera te ofrece un tutorial antes de lanzarte de cabeza al caos. Sin embargo, una vez que dominas los conceptos básicos, tanto si eres un recién llegado como si estás familiarizado con la historia del clásico de Neo Geo, la acción arcade es sencilla y cautivadora, y te atrae con una barrera de habilidad sorprendentemente baja, un estilo artístico deslumbrante y una ecléctica mezcla de personajes que dominar.
